"Educar es facilitar el aprendizaje a un individuo para que pueda adaptarse a las normas sociales".
Para mí, educar es facilitar el aprendizaje diario de tu perro para adaptarse a su entorno social.
¿Cómo facilitar el aprendizaje?
Cubre las necesidades individuales de tu perro. Simple pero no fácil. Su bienestar depende de múltiples factores adaptados a la individualidad de tu perro.
Partimos de la empatía para ponernos en su lugar, ver el mundo a través del olfato, sus necesidades sociales e instintivas. Conociendo las capacidades cognitivas tiene el perro para poder ayudarle a ser un perro adulto seguro con el que podamos convivir y evolucionar nuestra relación como uno más de la familia.
La etología frente al adiestramiento
Te comparto un secreto etológico: la repetición (estímulo-respuesta) del condicionamiento sin una motivación propia del perro no genera aprendizaje ninguno.
Moralmente, no comparto la idea de una educación tradicional basada en el control del perro y todos por igual.
Pero además, con la ciencia actual y las estadísticas en las manos, no funciona para educar.
¡Ojo! el adiestramiento si funciona. Funciona para adiestrar, aprender una habilidad que imponemos desde fuera.
Pero estamos hablando de educar de forma integral a nuestros perros de familia. El adiestramiento para educar no es suficiente y además es la causa de varios problemas en la relación, su autoestima… entre muchos.
Si eres de corazón pastor y controlador, centraté en controlar el entorno libre de peligros para que pueda aprender de forma experiencial y autónoma.
Deja que tu perro tome algunas decisiones de forma proactiva. Observarás muchas ventajas a nivel de autoestima y autorrealización. A nivel biológico, supone una generación de hormonas del bienestar.
Equilibrio entre la libertad de tu perro y tu intervención
Puede parecer confusa la línea entre cuándo dar libertad de gestión y cuándo intervenir en situaciones difíciles para él. Todo es observar y convivir, para darte cuenta de quién es el perro con el que convives.
Cuando no teníamos tanta información era mas sencillo. Si, repetir ejercicos con salsichas lo podía hacer todo el mundo. y ahora… las variables son muchas.
Pero ahora es más apasionante y cercano a tu perro. ¡Aviso! Una vez que abres la puerta no querrás dejar de caminar junto a tu perro. Descubrir el mundo canino te ayuda a conocerte mejor a ti.
¿Quieres ser un buen educador para tu perro?
Cambia el quiero que mi perro me obedezca, por un vamos a trabajar juntos en nuestra relación. Consigue que tu perro se sienta escuchado, se sienta parte del grupo familiar, te vea como su hogar seguro al que recurrir cuando aparezcan dificultades. Conviértete en una fuente de bienestar para tu perro y te seguirá sin dudarlo.
¿Quieres que te acompañe en este camino? Mi papel es darte el conocimiento y el acompañamiento para que tu seas el mejor facilitador del aprendizaje de tu perro en vuestro día día. Descubre el servicio de asesoria de bienestar y comportamiento canino.
